PASO 1º:

 En primer lugar lavamos bien la piel de las mandarinas y las secamos. Con un rallador fino, rallamos su piel sin llegar a lo blanco (foto 1ª).
 Disponemos en el vaso de la batidora los gajos de las dos mandarinas, sus ralladuras, el aceite y trituramos (foto 2ª).
  Añadimos el endulzante elegido, una pizca de sal,  los huevos y  volvemos a triturar hasta que una masa sin grumos.

PASO 2º:

 En un bol colocamos las harinas tamizadas y vertemos la mezcla anterior (foto 3ª). Mezclamos con una varilla o una espátula hasta que esté perfectamente todo integrado.
  Ayudándonos de una jarra rellenamos los agujeros del molde de silicona para donuts (es mejor con jarra, ya que la masa es un poco líquida) (foto 4ª).

PASO 3º:

 Introducimos en el microondas durante 6-8 minutos a 600W. Es importante  que nuestro recipiente pueda girar en el microondas, sino puede que el  horneado  no sea del todo correcto.
 Nosotros hemos hecho dos tandas con cuatro donut cada uno.
Sacamos del molde (foto 5ª) y colocamos los pastelitos encima de una rejilla hasta que enfríen (foto 6ª).

PASO 4º:

 Para decorar los donuts, derretimos al baño María el chocolate con una cucharada de aceite de coco.
 Con una cucharilla realizamos con el chocolate derretido unas líneas en la superficie de los donuts (foto 7ª). También los podemos bañar introduciéndolos en el bol del chocolate derretido.
 Dejamos enfriar hasta que se solidifique la cobertura.
 Servimos (foto 8ª y 9ª).
 NOTA: nosotros hemos endulzado ligeramente los donuts, con eritritol, un edulzante no sintético, que  proviene de algunas frutas y comestible. Tiene un  aspecto de polvo blanco cristalino, sabor dulzón, además de tener una alta tolerancia a la digestión. Pero podeís utilizar el edulcorante que más os guste, pasta de dátiles,..... o azúcar común.