Ingredientes (4 pers.):

- 300 grs de macarrones integrales
- 500 grs. de pulpa de calabaza asada
- 100 grs. de queso Gorgonzola
- 30 grs. de jamón serrano en lonchas
- Leche de entera c.n.
- Sal y pimienta
- Nuez moscada
- Tomillo

PASO 1º:

 Primero cortamos la calabaza por la mitad a lo largo y le quitamos las semillas con una cuchara.  Utilizaremos la mitad o lo que nos quepa en la cesta de la freidora. Untamos la pulpa de aceite de oliva y salpimentamos.
 Precalentamos la freidora de aire y colocamos las dos mitades de calabaza boca abajo y  las cocinamos a 180ºC durante 20 minutos. Pasado este tiempo, le damos la vuelta a la calabaza y dejamos que se ase durante 10 minutos más boca arriba para que se termine de dorarse (foto 1ª) (el tiempo de asadodependerá  del grosor de calabaza ). Igualmente lo podemos hacer en el horno a 200ºC. Una vez asada la calabaza la sacamos a un plato, dejamos templar y sacamos su pulpa.
 Colocamos en el vaso de la batidora la pulpa de la calabaza y trituramos con la cantidad de leche necesaria para que nos quede una salsa de calabaza (foto 2ª). Aliñamos con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada, probamos y rectificamos si hiciese falta el sazonamiento.

PASO 2º:

 Para decorar este plato, hacemos unas tiras de jamón crujiente, para ello, colocamos las lonchas de jamón serrano, quitándoles la grasa blanca, sobre un plato encima de un papel de cocina. Ponemos encima otro papel y otro plato, de manera que éste haga peso. Introducimos en el microondas durante un minuto y medio. Dejamos enfriar, para que quede crujiente (foto 3ª). También lo podemos hacer en el horno, a 160º durante 20 minutos.

PASO 3º:

 En último lugar, cocemos los macarrones integrales, para ello ponemos abundante agua en una cazuela, sazonada a razón de 10 grs. de sal por litro de agua. En el momento que el agua hierva, agregamos la pasta, bajamos el fuego, removemos y dejamos cocer a fuego suave, el tiempo recomendado por el fabricante en el envase. Si nos gusta "al dente" le damos, un par de minutos menos.
 Mientras se nos cuece la pasta, ponemos un Wok o sartén grande a fuego suave con la crema de calabaza y le añadimos el queso Gorgonzola (foto 4ª). Dejamos que éste se derrita y se integre completamente en la salsa.

PASO 4º:

 Una vez tengamos la pasta cocida, escurrimos, reservamos un cacillo del agua de cocción, por si tuviésemos que estirar la salsa. Vertemos los macarrones cocidos sobre la salsa y mezclamos bien, que la pasta se quede impregnada completamente por la salsa (foto 5ª). Si vemos que la salsa se nos ha quedado un poco seca, vertemos un poco del agua de cocción.
 Servimos la pasta y decoramos por encima con unas tiras de jamón crujiente y un poco de tomillo (foto 6ª).